Como bien sabemos el acento tucumano es característico y
bien distinguido en todo el país. Nuestra jerga es inconfundible. Contamos con
palabras u expresiones únicas.
En mayo de 2016, el diario La Gaceta publicó “El habla
popular de los tucumanos es un patrimonio cultural enorme”. Se trata de una
entrevista a la Prof. Mg. María Stella Taboada, en la que se aborda la
diversidad lingüística y el habla tucumana como “una potencialidad de
enriquecimiento cultural”
Entendemos el concepto de ideologías lingüísticas como
“sistemas de ideas que articulan nociones del lenguaje, las lenguas, el habla
y/o la comunicación con formaciones culturales, políticas y/o sociales
específicas”. A su vez, para definir representaciones sociolingüísticas, nos
apoyamos en Arnoux y Bein: esquemas orientadores socialmente compartidos de la
percepción y evaluación de los fenómenos lingüísticos.
A través del lenguaje, expresamos nuestra identidad,
nuestras formas de vivir los afectos, etc. Es a partir de estas afirmaciones
que propone a la diversidad lingüística como una potencialidad de
enriquecimiento cultural, al estar la lengua vinculada a procesos históricos y
sociales; de ahí, también, el concebirla como un patrimonio.
Al contrario de la mirada propuesta por la entrevistada, en
las opiniones realizadas por lo lectores predomina una actitud negativa frente
al habla popular tucumana. Sin embargo, esta actitud de rechazo no tiene
presencia total. Podemos dividir los comentarios en tres grupos: el
mayoritario, identificado con el rechazo y la desvalorización de la variedad
vernácula; un segundo grupo, que comparte una actitud positiva frente a la
misma variedad, y un tercer grupo, que manifiesta una actitud ambivalente o
bien, difícil de encuadrar en los otros grupos.
El rechazo va como una crítica hacía el “acento” o “tonada”
como una deformación que hay que corregir.
- La “mezcla” como una impureza que sería deseable depurar.
- Las “formas vulgares” (y su exaltación) como anormalidades.
- La valoración de “errores” como atraso y barbarie, al
vincularse los “errores” en el plano del lenguaje con “errores” en otros planos
como el del pensamiento (si se habla mal, se piensa mal).
El habla del tucumano es representada como un español mal
hablado, de forma horrible: es presentado como una deformación del español. Una
de las prácticas, que se identifican como diferenciales del habla tucumana y
que se estigmatiza con más frecuencia, el uso del verbo en pretérito compuesto,
que se opone al simple, característico de la variedad rioplatense.
“El Tucumano no usa el pretérito perfecto compuesto (he
dicho, he comprado, he vendido) ni el pretérito simple (dije, compré, vendí).
Dice "mei comprao" o tei dicho", " loi vendío"”.
"¿Cómo has amanecido?" El verbo amanecer no puede referirse a la persona. No puede conjugarse. Pero entre nosotros se usa así y no es incorrecto", aclaró la especialista en políticas lingüísticas.
Los tucumanos decimos "me hace frío" o "se me lo ha caído". En Buenos Aires dicen "se cayó". Los tucumanos necesitan plasmar en el lenguaje ese vínculo estrecho que tienen con los otros y con la realidad. Esa modalidad se ve también en las frases: "nos ha llovido un montón", "¿qué somos hoy?", o "¿qué parece?". Además, tenemos un permanente uso del plural: "¿cómo estamos hoy?" Tiene que ver con matrices culturales. Muchas madres tucumanas expresan la preocupación por un hijo, diciendo: "el chico no me come", o "no me lo estudia". El permanente uso pronominal en el habla tucumana refeja ese vínculo afectivo y no tendría que estar estigmatizado. Es una evidencia de nuestra identidad. De la manera en que nosotros sentimos los vínculos. Es un patrimonio cultural enorme que hace a nuestra identidad. El lenguaje es el recurso simbólico principal que tenemos, nos identifica y nos diferencia. Pero no logramos reconocer nuestra diversidad como una potencialidad de enriquecimiento cultural.
fuente: EL HABLA POPULAR DE LOS TUCUMANOS: ACTITUDES Y
REPRESENTACIONES SOCIOLINGÜÍSTICAS EN FORISTAS DE LA
GACETA. Jorge Sebastián Atar, María Agustina Ganami y Marco Rossi Peralta - UNT